lunes, 25 de enero de 2010

2-0. El orgullo de llevar una camiseta

Inexplicable. Indefinible. Sin palabras. Un equipo que corre, que pelea, que se mata, que rabia, que la pide, que chilla, que suda hasta la extenuación... la papeleta era difícil, muy difícil. Ortelanos, muy de largo junto a OCB el mejor equipo del grupo, nos ganó por dos goles a cero. De cada diez partidos, posiblemente nos ganaría ocho o nueve. Nada que decir. Muchos jugadores, todos muy bien preparados, y alguno de ellos de una categoría muy superior a la media. El resultado del Sábado da mucho más valor a la victoria albiceleste en la ida por 2-5. En esta ocasión, nada más se pudo hacer.

Desde el primer minuto, Ortelanos movía el balón con mucho ritmo y se plantaba con facilidad en nuestra área. El desconcierto era patente. Costaba muchísimo asentarse, no se pasaba apenas del centro del campo y el partido empezaba a parecer un rondo de los naranjas. Pero este equipo tiene mucho orgullo. Poco a poco empezó a meterse en el campo, a jugar más junto, a meter la pierna y a estirarse en ataque. Se empezó a achuchar mucho más y a partirse la cara en cada balón; Paco paraba todo lo parable... Ortelanos seguía dominando pero ya no llegaba con tanta claridad; el campo se empezó a nivelar e incluso, acabando la primera mitad, un punterazo de Alberto pudo significar el primer gol, pero el balón se estrellaba en el larguero. Con empate a cero se llegaba al descanso.

Empezó la segunda mitad con el equipo muy metido y más centrado que en primer acto. Ortelanos seguía dominando pero los albicelestes daban la cara y respondían con buenas jugadas. La mala suerte quiso que un balón lejano fuese desviado por un contrario en el área lo justo para ponernos en desventaja. La celebración del gol por parte rival dice mucho de la incertidumbre del partido. Pocos minutos después otro pelotazo raso desde muy lejos cruzaba un mar de piernas y ponía el 2-0 definitivo. Paco, muy tapado, poco podía hacer.

Danzig, una vez, apeló al orgullo de pertenecer a este equipo. Daba igual quien estuviera en el campo. Todos querían participar, luchar, empujar... el equipo mereció algún gol, pero no hubo manera. Diego, sempiterno goleador, tenía dos balones francos en el área, pero no había fortuna. Un doble penalti, acabando el partido, era detenido por el arquero rival, uno de los mejores del partido junto con su jugador nº 5.

Está claro que no siempre se puede ganar, pero perder así es disculpable. Perder así no puede doler. Aquí todos animan. Aquí nadie protesta, todos suman. Este grupo se ha ido fortaleciendo a lo largo del año y tiene suficientes argumentos para hacer un buen campeonato. La próxima jornada, Gran Gatsby, otro rival directo, volverá a poner a prueba a los albicelestes. No obstante, con esta actitud, se puede. Vaya si se puede.

4 comentarios:

DANZIG C.F.S. dijo...

Albertini, al final te van a dar el publicher.

Borat Segundo dijo...

Estamos en una dinámica tan positiva, que sale todo bien, vamos a por la temporada histórica!!!

deco-ronaldinho-etoo dijo...

joder q envidia.
se nota q hacia falta una limpieza en el vestuario

agapito dijo...

solo hemos hecho unos pequeños retoques en la plantilla ( 8 fichajes). el año q viene al martinez valero